El año 1994 catapultó definitivamente a este quilmeño a la cima de la magia mundial. En Yokohama ,Japón, se coronaba Campeón Mundial de magia con naipes.
A partir de este momento, el mago que había empezado a los 9 años como un juego y que ya tenía en su haber importantes premios en toda América, entró en la historia grande de la magia.
Sus shows tienen ese incomparable tono de humor que durante tantos años Adrián cultivó, llegando hoy a ser un toque característico en sus números.
A partir de este momento, el mago que había empezado a los 9 años como un juego y que ya tenía en su haber importantes premios en toda América, entró en la historia grande de la magia.
Sus shows tienen ese incomparable tono de humor que durante tantos años Adrián cultivó, llegando hoy a ser un toque característico en sus números.
Dijo Adrián: "la magia no debe ser solo un entretenimiento para sorprender a la gente. Un buen artista del ilusionismo debe emocionar a su público y hacerlo reir, brindándole algo más que un truco de magia".
En el 2004 logró otros de sus sueños con la apertura del restobar de magia llamado EMBRUJO; un lugar donde podrán ver su show y el de otros importantes magos.
Su aparición en congresos y concursos de magia es amplísima a lo largo de todos los años de su carrera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario